jueves, 8 de septiembre de 2011
TE AMO SIN INTERRUPCIONES
Mi madre, una señora a quien respeto porque no tiene pelos en la lengua, tuvo el infortunio de no poder terminar la escuela, a lo sumo cursó un primer grado. La vida no le dio la oportunidad de aprender a escribir ni contar los números, sin embargo ella sabe más de los números que yo, ella sabe que puede contar conmigo para lo que le plazca y eso es mucho más de lo que no sabe. No sabe cómo se escribe mi nombre, sin embargo sabe como quererme, como darme caricias en silencio, como abrazarme y como consentirme como madre, en ese caso le agradezco a Dios porque no aprendió a escribir quizá hubiese perdido el camino de saber cómo quererme sin interrupciones.
Lo que menos sabe es de ortografía, algo que me llena de emoción, porque sé que me quiere con todos los errores gramaticales que existen en nuestro idioma, y eso tiene un doble precio porque me quiere de muchas formas.
Tampoco sabe estrictamente el desempeño de cada signo de puntuación, eso me fascina porque no usa ni los puntos ni las comas, para demostrarme que me quiere. Esos puntos solo nos estorban porque se cruzan justo en la oración, por ejemplo sin puntos y comas y sin tomar aire me gustaría decirte: “hoy te puedo decir que te amo sin interrupciones porque no quiero que un punto ni una coma se me ponga delante de esta línea porque quitará el valor infatigable que tengo para demostrarte lo mucho que te quiero aun cuando no esté gramaticalmente en mi mejor momento porque cuando me acuerdo que te quiero hasta se me olvidan los puntos y las comas”…..
El arduo camino que has transitado, se ve reflejado en cada cicatriz que te ha dejado la vida, desde la muerte de mi padre, hasta los 7 hijos que tuviste. Cada arruga que te acompaña el cuerpo, la venero porque sé que es el valor incalculable que has tenido de luchar en contra de todo, hasta ver a tus hijos en una mejor posición como seres humanos.
Hoy cumplís 73 años, y puedo apostar inequívocamente, que el mundo no era tan interesante antes de que nacieras, hoy puedo dar fe, que por lo menos mi vida, ha sido descabelladamente impresionante gracias a tu existencia. Mercedes…Te quiero sin fecha de caducidad…
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Mis respetos eso es literatura.
ResponderEliminaratte dgprez